
El Congreso de la Nación y Plaza de Mayo serán escenario de una marcha y movilización organizada por agrupaciones de jubilados, a las que se suman piqueteros como el Polo Obrero, partidos de izquierda, trabajadores del Hospital Garrahan, las dos CTA, el gremio ATE, algunos sindicatos como el de neumáticos, el Frente Patriótico por la Justicia Social, la organización Territorios en Lucha y representantes de la Unión Trabajadores de la Economía Popular (UTEP).
Será este miércoles 19 de noviembre desde las 16. La consigna es “contra el imperialismo”. Desde el Ministerio de Seguridad de la Nación advirtieron que, como la semana pasada, se desplegará un operativo de fuerzas federales para aplicar el protocolo antipiquetes. En esa oportunidad, la protesta frente al Palacio Legislativo derivó en fuertes incidentes entre fuerzas federales, como Gendarmería, y un grupo de manifestantes.
“Comienza la resistencia callejera a la reforma laboral y al acuerdo con los Estados Unidos”, anunció el secretario general de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE), Rodolfo Aguiar, y recordó que esa organización sindical declaró un paro de 24 horas para facilitar la movilización de sus afiliados.

“Tiene que ser un paro que nos permita volver a encender la llamita de la conflictividad y que esta crezca rápidamente”, expresó el dirigente. Recordó que ATE participará de las protestas junto a las organizaciones de jubilados y el Frente de Lucha Piquetero, con quienes desde las 16 confluirán en la Plaza de los Dos Congresos para una hora después marchar hacia Plaza de Mayo.
Aguiar también opinó: “La reforma laboral y el reciente acuerdo con los Estados Unidos están íntimamente vinculados. Trabajar más y por menos plata para abaratar los costos del saqueo. Sin huelga y movilización no la frenamos”, dijo en una velada crítica a la CGT, que no adhiere a la convocatoria.
Los organizadores aclararon: “La marcha tiene claras banderas contra Donald Trump, contra Javier Milei y contra el Fondo Monetario Internacional”, y que por esa razón se decidió realizarla “veinticuatro horas antes del Día de la Soberanía”.

Desde el Ministerio de Seguridad de la Nación y de la jefatura de gobierno de la Ciudad, dejaron en claro que, como cada miércoles, se impondrá el protocolo antipiquetes, se diagramó un vallado para proteger los edificios públicos como el Congreso de la Nación y la Casa de Gobierno y se evitarán cortes de arterias de manera permanente.
Los movimientos sociales, agrupados en la Unión Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), también participarán de la jornada de protesta. Esta vez no lo harán con columnas numerosas, enviarán grupos de representantes en señal de apoyo a los reclamos. Algo similar sucede con las organizaciones que forman parte de Territorios en Lucha, que integran, entre otros, Libres del Sur. El movimiento liderado por Silvia Saravia tampoco lo hará encolumnado. Como la mayoría de los convocados, llegarán desde distintos puntos del AMBA en medios de transporte público.

Desde que la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, comenzó a imponer el protocolo antipiquetes, retener a los micros y camionetas mal estacionados y sin la habilitación correspondiente, los piqueteros y organizaciones sindicales de base modificaron la forma de concentración. Ya no se ven columnas que marchan desde Retiro y Constitución e interrumpían el tránsito en arterias claves, como puede ser la Avenida 9 de Julio.
Las políticas sociales de distribución de alimentos y la eliminación de programas sociales como el Potenciar Trabajo, que les daba potestad a los dirigentes sociales sobre los sectores más vulnerables, también hizo menguar la afluencia de asistentes a las marchas y concentraciones.

Esteban “Gringo” Castro, el ex secretario general de la UTEP y referente del Frente Patriótico por la Justicia Social, confirmó su presencia en el acto que finalizará con algunos discursos de representantes de los trabajadores del Hospital Garrahan, docentes universitarios y representantes sindicales, jubilados y piqueteros de izquierda.
“No hay ninguna posibilidad de salir adelante como pueblo si no nos expresamos pacíficamente en las calles de todo el país. Eso va a suceder porque tenemos un pueblo maravilloso que nunca va a dejar de luchar uniendo la fe y la lucha”, opinó ante una consulta de Infobae.
Castro también expresó: “Nuestro pueblo está hambreado. Tenemos que pelear. No solo Milei, Caputo y Pettovello quitaron la comida a los comedores y merenderos comunitarios, con auditorías nunca realizadas, además nuestra conquista más importante, que fue el Salario Social Complementario, está en la mitad de la mitad de un salario mínimo, vital y móvil”. Y finalizó: “Es indigno que se gane 78 mil pesos al mes trabajando 14 o 12 horas todos los días en las distintas actividades de la economía popular”, aseguró el líder social.
La actividad contra las políticas económicas y sociales de La Libertad Avanza se difundió a través de una conferencia de prensa el lunes 17, en la cual se aclaró: “Se marcha en todo el país con la consigna ‘Contra el ajuste y la entrega. Abajo el pacto de Javier Milei con Donald Trump y el Fondo Monetario Internacional’” y en “reclamo de una huelga general para impedir las reformas laboral, previsional, impositiva y penal”.
Desde la organización se difundió un comunicado en el cual se afirma: “Esta marcha se realiza en momentos en que el imperialismo en forma directa interviene en Argentina. Trump y el FMI deciden sobre las elecciones, sobre lo que se resuelve en el Congreso, sobre la economía, sobre la represión, sobre los trabajadores, jubilados, desocupados, sobre el agua y sobre todas las riquezas del suelo y la tierra”.
Antes de marchar a Plaza de Mayo, las organizaciones de jubilados tienen previsto realizar, a las 16 horas, una “radio abierta” sobre Avenida Rivadavia, entre Callao y Combate de los Pozos, y se mostrarán las firmas recogidas que se manifiestan “contra el pacto Milei-Trump-FMI”.



