
Tras la controversia que se despertó a nivel nacional y hasta una crítica pública de Victoria Villarruel, Vialidad Nacional dio marcha atrás y le devolverá al Obispado de Posadas los 560 mil pesos que le cobró por la procesión al Santuario de Nuestra Señora de Loreto, en la que se utilizó la banquina de la Ruta Nacional 12 (RN12).
“Se está trabajando para que el día martes (después del fin de semana largo) podamos devolver el dinero”, indicó una alta fuente de Vialidad Nacional (VN) a Infobae durante la tarde del jueves.
Y agregó: “Fue un malentendido administrativo. Se le devolverá el dinero”.
El ente vial había decidido aplicar un artículo de la legislación vigente que nunca se había usado hasta ahora, el número 60 de la Ley Nacional de Tránsito. El apartado establece que, para actividades no relacionadas con el tráfico de vehículos, debe pedirse autorización y pagar un canon.
La decisión de cobrar por la peregrinación a la Virgen de Loreto llegó por correo electrónico 48 horas antes de la realización de la tradicional caminata, concretada entre la tarde del 15 de noviembre y la madrugada del 16.

Esto causó mucha irritación en las autoridades religiosas. El Obispado se encargó del pago, que se hizo efectivo a través de la plataforma TAD (trámites a distancia). Lo recaudó ARCA, pero los fondos terminaron en el tesoro de Vialidad Nacional.
Las quejas de la Iglesia
Según explicó a Infobae el padre Leo Cuenca, organizador del evento, para realizar la marcha religiosa “hubo que pagar un arancel a Vialidad por la intervención del camino”. Lo que generó molestias no fue el cobro, sino la manera en que se dio. A diferencia de lo que ocurría antes, cuando el trato para organizar la peregrinación era con funcionarios del organismo destacados en la provincia, ahora debieron manejarse vía correo electrónico.
“La información la recibimos 48 horas antes de la peregrinación”, apuntó Cuenca. Y agregó: “Es la primera vez que ocurre. Peregrinamos hace 24 años. El modus operandi siempre es el mismo: solicitamos los permisos a las fuerzas de seguridad y a Vialidad. La sorpresa la tuvimos este año con el cobro por peregrinar en la banquina”.

Loreto es una de las 37 ciudades del circuito de las Misiones Jesuíticas, formado por las Reducciones evangelizadoras que realizó la Compañía de Jesús hace 400 años en lo que hoy es Misiones, parte de Paraguay y sur del Brasil.
Según explicó el religioso, la tarifa estuvo en relación con el tiempo de uso de la vía lateral al camino nacional. Es decir: los $560 mil pesos se corresponden con la utilización durante la ventana que iba desde las 18 del sábado a las primeras horas del domingo.
El titular de la Diócesis, el obispo Juan Rubén Martínez, también se sumó a la polémica. “No quiero ser malo, pero (la decisión se dio) justo en un momento en que Vialidad Nacional no pone un peso en las rutas”, expresó a medios locales.

“Me manejo mucho por las rutas argentinas. La verdad, hasta tienen el tinte de peligroso porque no se arreglan, están en una situación de absoluto abandono. Y, de pronto, en medio de ese contexto tan preocupante, pidieron 500 mil pesos para caminar por la ruta”, cuestionó.
Horas antes de que se conociera la decisión de Vialidad de dar marcha atrás y devolver el dinero, el prelado sostuvo: “Vamos a averiguar jurídicamente cuál es el fundamento. Hasta me parece anticonstitucional. Transitar libremente es un derecho en la Argentina”.
La preocupación de la comunidad católica no se detenía en lo que había ocurrido en la peregrinación a Loreto, donde se movilizaron 12 mil personas. El foco estaba puesto en lo que podría llegar a pasar con la convocatoria de la Virgen de Itatí, patrona del noreste argentino, en Corrientes. Allí, el número de caminantes se multiplica y, por tanto, el tiempo de uso de las vías nacionales para transitar, también.



