Javier Milei eligió sostener a Espert como candidato pese a las denuncias

Las caras visibles del acto de ayer frente a la cárcel de Ezeiza para presentar la propuesta de un nuevo Código Penal fueron Javier Milei y su ministra de Seguridad, Patricia Bullrich. Pero, más que en la tarima, las miradas estuvieron posadas en las primeras filas. Las especulaciones giraban en torno a José Luis Espert, cuya asistencia -o no- podía esclarecer las crecientes, inquietantes dudas sobre su continuidad al frente de la lista de candidatos de La Libertad Avanza (LLA), nada menos que en la crucial elección legislativa en la Provincia de Buenos Aires.

La incertidumbre provenía de las erráticas y, por momentos, contradictorias respuestas que había brindado el mundillo libertario ante la aparición de nuevas pruebas y acusaciones contra “el Profe”, como llama Milei cariñosamente a su amigo desde que se reconciliaron a fines de 2023, cuando ganó las elecciones presidenciales.

Aunque el Gobierno entró en estado de deliberación para ver cómo sorteaba la tormenta, buena parte de los movimientos políticos del Gobierno durante los días de crisis no fueron ordenados o consensuados desde la cúpula. Así, los silencios y los señalamientos de los propios violetas, en off y en on, convivieron alternadamente con la defensa del propio Presidente, que dejó correr las versiones. Un alto miembro de la cima de LLA admitió que no hubo una estrategia coordinada y calificó el operativo directamente como “un desorden”.

A pesar de que desde el inicio estuvo decidido, por orden del Presidente, que Espert continuara como candidato, los cuestionamientos internos y las fallas de comunicación del propio acusado, junto a la revelación de nuevos elementos probatorios, generaron nuevas vacilaciones. “Si Espert habló, es porque se le había pedido que hablara. Pero no se defendió en la línea de lo que se le había pedido”, dijo, con sutileza, un importante asesor, después de varias jornadas de sospechas y tirones de orejas internos.

El presidente apoyó al candidato a diputado nacional

El acto en Ezeiza y la defensa “final” del Presidente con el mensaje grabado de Espert mirando a cámara, publicados anoche, salieron luego de tres días de mensajes fluctuantes y por momentos contradictorios de parte del Gobierno.

Como en cada momento de crisis grave, los principales representantes del oficialismo no pudieron seguir una estrategia clara, ni lineal, para lidiar con el escándalo de los vínculos de su principal postulante en el distrito más poblado (y donde el narco es uno de los problemas más graves), con el tráfico de drogas. Desde que se conocieron nuevas pruebas de los vínculos de Espert con el narcotraficante condenado Fred Machado, la cúpula libertaria fluctuó entre el silencio, el apoyo y las dudas, hasta que finalmente el Presidente, con ayuda de su asesor principal, Santiago Caputo, terminó brindándole respaldo total -y dicen en la Casa Rosada, “definitivo”- a Espert.

Cronología de una nueva semana crítica

Primero reinó un total silencio de parte de la primera plana del oficialismo: ni siquiera en las redes sociales los libertarios de Santiago Caputo salieron ni a defender ni a cuestionar a Espert, que también se guardó por completo. Después, el Presidente pareció marcar la directiva, cuando salió a sostenerlo a pesar de la magnitud de las acusaciones. Fue en una entrevista matutina con A24, el martes. “Son chimentos de peluquería”, dijo, sin más.

Para sorpresa de todos, al día siguiente, Bullrich, una de las ministras preferidas del jefe de Estado, salió en el mismo canal a pedirle explicaciones a Espert, y generó una ola de especulaciones. ¿El Presidente había cambiado de opinión o su funcionaria se había cortado sola? Después, la titular de Seguridad se ocupó de aclarar, quizá para bajar la espuma de las internas, que en 2019, cuando empezó su vínculo con Fred Machado, Espert “era un novato en la acción política, que no conocía nada de la actividad y estaba solo».

Horas después, Milei, sin mencionar a Bullrich, volvió a defender al diputado. Aseguró que nunca estuvo en sus planes correrlo de la lista para el Congreso, y calificó la denuncia de Juan Grabois como “un refrito de algo que pasó hace seis años”.

24 horas después, el jefe de Estado se sumó al acto de presentación del nuevo código penal que tenía previsto realizar Bullrich. Una señal de que su apoyo y cercanía con la ministra no estaban en duda, a pesar de que la ex PRO había sembrado dudas sobre la posición presidencial, que ubica a Espert no sólo como inocente sino como víctima de la maniobras de la vieja política.

En el entorno de la funcionaria aseguraron que sus declaraciones habían sido consultadas previamente con el Presidente, una versión que en la Casa Rosada no negaron ni constataron. Sí admitieron que la determinación de que Espert aclarara su situación había sido consensuada en la mesa política nacional. “Suponemos que ella hizo pública esa decisión para presionarlo para que saliera a hablar”, dijeron en Balcarce 50.

Lawmaker Jose Luis Espert arrives to attend Argentina's President Javier Milei presentation of a new Penal Code at the Federal Penitentiary Complex I in Ezeiza, on the outskirts of Buenos Aires, Argentina October 2, 2025. REUTERS/Alessia Maccioni

Ante la presión de la cúpula, el acusado se hizo cargo, finalmente, de intentar justificar su vínculo con Machado. Fue el miércoles por la noche, en una entrevista con A24, pero sus argumentos, y la renuencia a responder la pregunta más importante resultaron por demás insuficientes, incluso para los propios -el grueso del Gabinete-, pero también para los aliados -los máximos referentes de PRO se desligaron-. Mientras, la oposición se hizo un festín.

A continuación, en un nuevo vaivén oficial, Guillermo Francos, el jefe de Gabinete, que responde directamente al Presidente, se ubicó en la línea de Bullrich, y exigió una “explicación clara”. Desde entonces, se multiplicaron las versiones de que el economista saldría a hablar por tercera vez.

Aún así, el Presidente tenía decidido sostener en pie la candidatura de Espert. Junto con su hermana, Karina Milei, que organiza todos sus actos, decidieron invitarlo -o permitirle asistir- al acto en Ezeiza y revalidar el respaldo presidencial.

Poco antes de esa puesta en escena, el principal asesor presidencial y estratega de la campaña, Santiago Caputo, lo recibió en el salón Martín Fierro de la Casa Rosada, y en su círculo dijeron que lo había instruido sobre cómo comunicar. Mientras tanto, en el comando de campaña violeta dejaban trascender que Espert se sumaría al acto proselitista del lunes en San Isidro -del cual, pocas horas antes, supuestamente había sido apartado-. Y la cuenta oficial de La Libertad Avanza en PBA difundía un extenso video grabado dos días antes, de Espert junto a Diego Santilli en una recorrida de campaña en Olavarría.

La publicación del video “oficial” de Espert mirando a cámara estaba previsto para el viernes, pero el equipo de comunicación se vio obligado a apurarlo, anoche, cuando fue revelado en una nota del diario La Nación, el documento que confirmó la transferencia de 200 mil dólares de parte de Fred Machado a una cuenta de Espert.